Google lanza su propia tarjeta de débito en Estados Unidos, la Google Wallet Card, que permitirá realizar pagos en tiendas así como disponer en efectivo del dinero que los usuarios tengan en sus cuentas asociadas de Google Wallet.
Así, con la nueva tarjeta de Google se podrá hacer operaciones en los millones de establecimientos que admiten MasterCard y sacar dinero en cualquier cajero automático. De este modo, sus usuarios no tendrán que transferir el dinero del que dispongan en Google Wallet a sus cuentas bancarias tradicionales, permitiéndoles operar con él inmediatamente. Además, la tarjeta de Google es gratis, por lo que no tiene ninguna cuota anual, ni comisiones y sus titulares recibirán notificaciones cada vez que gasten dinero con ella.
La tarjeta Wallet Card permitirá al gigante de Internet tomar una posición más relevante en el comercio y brinda a Google la oportunidad de oro de obtener más información sobre los hábitos de consumo de los usuarios, que podría utilizar para publicidad. Los datos de las transacciones realizadas con la tarjeta pasarán a formar parte de los perfiles de los usuarios de los servicios que Google emplea de forma interna. Tales datos abarcarán, la descripción de los bienes y servicios adquiridos, importe e información del vendedor. La nueva tarjeta se puede solicitar por Internet, la compañía prevé un plazo de entrega de 10 ó 12 días.
Este desembarco de Google en los medios de pago abre una dura batalla por los servicio financieros con la banca tradicional. Algo a lo que hay que añadir la capacidad de análisis y gestión de datos que tiene Google y su gran potencial para definir modelos de negocio y nuevos servicios, lo que podría suponer un gran impacto en la industria financiera. Además, en esta guerra, no podemos olvidar el auge de las transacciones con dispositivos móviles que se han disparado en los últimos meses.
Fuente: www.finanzas.excite.es
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